Del mayor cineasta vivo de Portugal llega esta alucinación onírica de un alma perdida que pertenece a la clase baja reprimida, abusada, y olvidada del país. Con su cine político fascinantemente poético, Pedro Costa da a lo inaudito y lo invisible una voz y una verdadera presencia cinematográfica.
A masterpiece about the making of a masterpiece, this crepuscular portrait of Straub-Huillet’s creative process has been described by Pedro Costa as both his first comedy and his first love story. Intimate and illuminating, it’s an indispensable lesson in filmmaking from three titans of cinema.
Drawing inspiration from Godard’s Sympathy for the Devil, Pedro Costa fashions an idiosyncratic, black and white portrait of French actor and singer Jeanne Balibar. Capturing the star in long, seductive takes, the Portuguese master eschews biography for the smoky, mystical groove of ineffability.
¡Si todas las películas ómnibus fueran tan buenas! Cuando Guimarães era la Capital Europea de la Cultura, se organizó esta luminosa reunión de visionarios: Aki Kaurismäki, Pedro Costa, Victor Erice y Manoel de Oliveira. Irritados, tristes, inquisitivos y cómicos, se adentran en el alma de Portugal.
