Películas hermosas e interesantes
En un tranquilo suburbio de Massachusetts, alrededor de 1970, J.B. Mooney, un padre de familia desempleado y ladrón de arte aficionado, se embarca en su primer robo. Con el museo vigilado y los cómplices reclutados, tiene un plan infalible. O eso cree él.
Con mirada artística e imprevisibilidad jazzística, Kelly Reichardt desenreda la madeja del género del robo en esta joya de Cannes. Como antihéroe al borde de los setenta, Josh O’Connor es imposible de ignorar, aportando un desgarbado desdén a esta visión irónica del individualismo estadounidense.