Leonard Shelby es un hombre que ha perdido la memoria y que es incapaz de fijar recuerdos más allá de unos pocos minutos. Su único objetivo en la vida es vengarse del hombre que violó y mató a su esposa, del que sólo sabe su nombre de pila y la inicial de su apellido.
Un misterio de asesinato en líneas temporales no lineales, el film de Christopher Nolan es ejemplo de un director que descubre y refina obsesiones y técnicas a lo largo de su carrera. Pero lo más importante es que Memento es infinitamente inventiva, perfectamente calibrada y emocionalmente rica.