Gérard Arpel vive con sus padres en una casa ultramoderna, pero prefiere estar con su tío Hulot, que lo lleva con él a la antigua ciudad. Los padres de Gérard intentan que el Sr. Hulot se adapte a la vida moderna y le consiguen empleo en la fábrica de mangueras de plástico antiséptico del Sr. Arpel.
Ganadora de un Oscar®, la primera película color de Jacques Tati enfrenta a Monsieur Hulot a la tiranía del hogar moderno de mediados de siglo. Al convertir imprácticos artilugios en chistes visuales, Mon oncle burla a la cultura consumista que siguió al auge económico de la posguerra en Francia.