Luciano es un encantador y cordial pescadero cuya inesperada y repentina obsesión por ser concursante del reality show Gran Hermano lo lleva por un laberinto de percepciones distorsionadas y paranoia. Tan abrumado por su sueño de aparecer en la televisión, la realidad de Luciano se sale de control.

El sorprendente ganador del Gran Premio de Cannes 2012, la enigmática secuela de Gomorra de Matteo Garrone, no es una simple sátira de los reality shows, sino algo mucho más extraño. Esta absurda pesadilla cómica muestra un país atrapado entre la buena vida y el Papa. En algún lugar, Buñuel sonríe.