Sacada de la competencia de Cannes el año en que Polonia declaró la ley marcial, la fábula de Piotr Szulkin sobre una invasión alienígena satiriza la máquina mediática. Dedicada a H.G. Wells y Orson Welles, en clave de sci-fi noir, cuestiona, inquietante y premonitoriamente, la era de las fake-news.