En pleno verano en un centro recreativo cerca de París no faltan las situaciones divertidas. Un vistazo a la mentalidad de visitantes y empleados de un gran parque a donde acuden a relajarse tanto franceses originales como migrantes que no tienen los medios para unas vacaciones más exóticas.
Guillaume Brac vuelve al parque acuático de su infancia con un elegante documental que observa un espacio recreativo aparentemente mundano como oasis urbano y refugio del ajetreo parisino. Bajo este aspecto lúdico hay un comentario incisivo y profundamente conmovedor sobre la inmigración en Francia.