Varado en una isla tropical desierta, un hombre lucha por sobrevivir. Poco a poco va adquiriendo las habilidades necesarias para mantenerse con vida e intenta salir de la isla en una balsa improvisada, pero se topa con una tortuga gigante que vive en alta mar y que cambiará su vida.

Una sencilla historia espectacularmente contada, el drama animado existencial y emocional de Michael Dudok de Wit es otra entrada impecable en el inigualable catálogo de Studio Ghibli. Una película serena, minimalista y espléndidamente elaborada, sin palabras, diálogos, música ni efectos especiales.