Piotr Szulkin conjura una visión claustrofóbica de la Polonia posnuclear y centra su satírica mirada en el uso de la religión como arma y medio de control social. Con impresionante eficiencia, O-Bi, O-Ba crea un mundo y muestra un alucinante estudio de las ansiedades apocalípticas en la era atómica.

Basada en una leyenda judía, esta kafkiana obra de ciencia ficción especulativa es el debut de uno de los grandes visionarios del siglo XX. Con un mundo de dioses y monstruos salidos de una pesadilla, Piotr Szulkin elabora un Prometeo moderno y una poderosa alegoría del experimento comunista polaco.

Sacada de la competencia de Cannes el año en que Polonia declaró la ley marcial, la fábula de Piotr Szulkin sobre una invasión alienígena satiriza la máquina mediática. Dedicada a H.G. Wells y Orson Welles, en clave de sci-fi noir, cuestiona, inquietante y premonitoriamente, la era de las fake-news.

Inspirado por La Ricotta, de Pasolini, Piotr Szulkin cierra su “Tetralogía apocalíptica” con una anárquica versión libre de la Pasión de Cristo. La más graciosa de estas cuatro películas, Ga-Ga: Glory to the Heroes es una alegoría sci-fi que apunta satíricamente al proyecto colonial europeo.